Hablar de los Balcanes es hacerlo, desde cualquier punto de vista, de una de las zonas más interesantes y atractivas para el viajero de toda Europa...multiculturalidad, paisajes, historia, ciudades con encanto, gastronomía, vida nocturna...y todo esto a precios más asequibles que en cualquier otro destino del continente...parece que cualquier atractivo que allí busquemos lo vamos a encontrar.
Sin embargo, preparar un viaje a esta zona no siempre resulta sencillo...a diferencia de otros destinos más explotados turísticamente, en los que podemos preparar desde casa hasta el último detalle de nuestro viaje, en los Balcanes esto no es siempre así, siendo necesaria en muchas ocasiones la improvisación...la planificación sobre la marcha...por ello, tras mi segunda experiencia de casi 3 semanas en los Balcanes, voy a tratar de reunir el máximo posible de información sobre cómo viajar por esta zona, algunos consejos sobre qué transportes utilizar, información sobre precios...a fin de hacer un poco más fácil la preparación de un viaje por un destino muy especial.
¿Qué son los Balcanes?
Al hablar de la península balcánica o península de los Balcanes, hacemos referencia a la extensión de terreno de unos 660.000 km² comprendida entre los propios montes Balcanes y los Alpes Dináricos, territorio que comprende en su práctica totalidad a los países de la ex Yugoslavia: Eslovenia, Croacia, Serbia, Bosnia y Herzegovina, Montenegro, Kósovo y Macedonia, además de la Grecia continental, Albania, una pequeña porción de Italia, parte de Rumanía, Bulgaria y la región turca de la Tracia oriental.
En este post vamos a referirnos especialmente a los países de la antigua Yugoslavia, así como a Trieste (norte de Italia) y la Grecia continental (Tesalónica y Atenas).
Itinerario.
Como en cualquier viaje, elegir un itinerario adecuado a nuestros gustos, época del año en el que lo realicemos o tiempo del que dispongamos resulta fundamental para llevar a cabo una buena planificación.
En el caso de los Balcanes, considero que esta planificación es aún más importante, pues a pesar de no ser una zona excesivamente grande en cuanto a kilómetros, los medios de transporte no son tan eficientes como podríamos imaginar...a modo de ejemplo, los 370 Km que separan Zagreb de Sarajevo, o los poco más de 400 kilómetros que separan Belgrado y Podgorica, se traducen en 9 y 11 horas de tren respectivamente...o dicho de otra forma, a no ser que dispongamos de tiempo ilimitado, resulta prácticamente imposible abarcar todos los atractivos de esta zona en un solo viaje.
En mi caso, tras varias semanas de planteamiento, y decidir que comenzaría mi viaje por Italia para terminar en Grecia, acabé planeando dos posibles rutas:
1) realizar el viaje por la costa: desde Trieste cruzaría la frontera eslovena visitando Koper, y posteriormente Croacia, recorriendo el amplio litoral del país y visitando las ciudades de Zadar, Split y Dubrovnik, entrando en Bosnia para visitar Mostar y continuar mi recorrido a través de Montenegro y Albania, para después entrar a Grecia y concluír el viaje en Atenas.
2) realizar el viaje por el interior: visitando las capitales de Eslovenia, Croacia, Bosnia, Serbia y Macedonia, además de ciudades importantes como Maribor, Banja Luka o Nis, para entrar posteriormente en Grecia vía Tesalónica.
Finalmente, me decidiría por la segunda opción...por un lado ya había visitado las costas de Eslovenia y Croacia, y sabía que aunque interesante, esta zona se volvía muy turística durante el verano, periodo en el que realizaría el viaje, con el consiguiente tumulto de turistas, dificultad para reservar alojamientos e incremento en la subida de los precios. Por otro lado, lo que me interesaba de los Balcanes era su historia, y pensaba que la mejor forma de entenderla era visitando sus capitales, sus grandes ciudades...núcleos urbanos como Sarajevo, Belgrado...en los que las huellas de la historia siguen aún muy presentes.
En cualquier caso os invito a que toméis vuestro tiempo a la hora de decidir...las posibilidades son amplias y muy variadas, y teniendo claro que es (casi) imposible verlo todo ''del tirón'', en unas 2 semanas da tiempo a realizar itinerarios muy interesantes en los que es posible visitar detenidamente 3-4 destinos diversos, variados y con mucho que ofrecer.
Documentación y Visados
En la actualidad, para los ciudadanos de la Unión Europea no es necesaria la adquisición de visado en ninguno de los países de esta región. En muchos casos, es hasta innecesario el pasaporte (a excepción de Albania), pues podemos acceder con nuestro documento de identidad (DNI) en vigor. No obstante, os recomiendo que viajéis con ambos documentos (DNI y pasaporte), pues en caso de pérdida de uno, siempre podemos recurrir al otro.
Particularmente, os aconsejo que utilicéis en el día a día vuestro pasaporte, y guardéis el DNI para casos de necesidad...pues el primero es mucho más ''reconocible'' para policías y funcionarios de puestos fronterizos, y evitaréis así posibles preguntas o suspicacias sobre vuestra procedencia, motivos del viaje..
Monedas y Precios
Por lo general, el día a día en los Balcanes resulta bastante más económico que en España. A excepción de Eslovenia y Grecia, donde la moneda es el Euro, y algunos destinos turísticos de las costas croata y montenegrina (Dubrovnik, Split, Kotor..), donde los precios son más similares a los que estamos acostumbrados, a lo largo de nuestro viaje por el interior de Croacia, Bosnia, Serbia, Kosovo, Montenegro, Macedonia o Albania encontraremos precios, en muchos casos, por debajo de la mitad en relación a la Europa occidental.
A continuación os dejo un listado con la moneda de cada país, así como su equivalencia en Euros (a fecha de septiembre de 2014). Para el cambio, nos será bastante fácil encontrar bancos y oficinas en el centro de las principales ciudades, con tasas más favorables (en ocasiones inexistentes) que las que obtendríamos de realizar el cambio en España, así como en aeropuertos o estaciones.
PAÍS MONEDA CAMBIO
Eslovenia: Euro -
Croacia Kuna 1€ = 7,62 HRK
Bosnia: Marco bosnioherzegovino 1€ = 1,95 BAM
Serbia: Dinar Serbio 1€ = 118,76 RSD
*Kosovo: Euro -
*Montenegro: Euro -
Albania: Leke 1€ = 139,77 ALL
Macedonia: Denar macedonio 1€ = 61,43 MKD
Grecia: Euro -
*Kosovo y Montenegro, a pesar de no estar en la zona Euro, utilizan esta moneda como oficial
Transportes
Cómo llegar a los Balcanes: en la actualidad, es difícil encontrar líneas low cost que operen desde España hasta las principales ciudades de la región (Liubliana, Zagreb, Belgrado..) por lo que, a excepción de alguna oferta puntual, lo más económico para llegar a esta zona es volar a alguno de los países de los alrededores (Italia, Hungría, Rumanía o Bulgaria) con los que sí existen numerosas conexiones, y desde ahí proseguir nuestro viaje en tren o autobús. Para ello, os recomiendo mirar vuelos con Ryanair a aeropuertos como Venecia-Treviso, Trieste o Bérgamo, o con Wizzair a Budapest, Timisoara o Bucarest.
Ya en los Balcanes: por lo general, el transporte en los Balcanes, ya sea dentro de un país o entre varios países, no suele resultar un problema, pues las conexiones son numerosas y los precios asequibles. A lo largo de mi experiencia en esta región, he utilizado principalmente dos medios, el autobús, aproximadamente un 70% de las veces, y el tren, el 30% restante. Normalmente suelo preferir el tren, pero el caso de los Balcanes es algo peculiar, ya que, si bien la mayoría de capitales están conectadas varias veces al día por carretera, los diferentes conflictos acontecidos en los 90 provocaron que muchas líneas férreas cerraran (caso de la línea Sarajevo - Belgrado) y otras fueran reformadas, dando rodeos innecesarios y alargando varias horas nuestro viaje.
Además, el autobús resulta algo más económico que el tren, y al haber trayectos prácticamente a diario, nunca suele haber problemas a la hora de encontrar un billete (pudiendo comprarse, incluso en temporada alta, el mismo día del viaje). Otro dato que puede resultar práctico es que la mayoría de estaciones de autobús en los Balcanes suelen estar junto a las estaciones de tren, de hecho en ocasiones ambas forman parte del mismo edificio, por lo que antes de decidir qué medio de transporte usar, podemos comparar precios y horarios sin mayor inconveniente.
Para planificar vuestro viaje, os dejo el link de dos páginas que me han sido de gran utilidad, Balkanviator, un buscador en el que podemos ver la frecuencia y horarios exactos de las conexiones entre ciudades en autobús, así como las diferentes compañías que los realizan, y la tradicional DH Bahn, la renfe alemana, en la que podemos consultar horarios de los trenes en toda Europa. El único inconveniente es que suele resultar complicado comprar los billetes online, pero como digo, una vez en el destino os resultará de los más sencillo conseguirlos.
Alojamiento y comidas
La oferta hotelera de esta zona de Europa no deberá plantearnos ningún tipo de problema, pues tanto en las grandes ciudades como en las zonas rurales y costeras más turísticas es amplia, variada y con precios asequibles para todo tipo de bolsillos. A lo largo de mi estancia en los Balcanes he experimentado tres tipos de alojamientos:
Habitación compartida en albergues: se trata de la oferta más económica..su precio ronda entre los 6 y los 10€ la noche, suelen estar bien ubicados, y por un precio inferior al de los albergues de la Europa occidental podemos encontrar un servicio igual o incluso mejor. Todos suelen tener conexión a internet, mapas e información de la ciudad gratuita y algunos pueden incluir el desayuno en el precio. Es la mejor opción para aquellos que viajen solos, así como para los grupos de amigos abiertos a conocer otros viajeros.
Habitación privada en albergues/hoteles: atendiendo al lugar en el que nos encontremos, estas habitaciones privadas en albergues de juventud, pensiones y hoteles manejan un rango de precios muy variado, desde los 10-15€ de algunas pensiones hasta los más de 100€ de los hoteles con varias estrellas de las capitales...todo dependerá de vuestro presupuesto, nivel de exigencia...dado que las ciudades no son excesivamente grandes, el aumento de precio no suele deberse a la localización del hotel, sino a sus servicios, comidas incluidas...por ello si renunciáis a determinados lujos podréis encontrar habitaciones privadas muy bien ubicadas a precios de habitación compartida en otros países europeos.
Alquiler de apartamentos: al igual que en otros puntos de Europa del este, alquilar apartamentos en los Balcanes puede resultar una opción bastante rentable...muchos particulares, especialmente en las grandes ciudades, suelen alquilar pisos por días a precios muy competitivos...por unos 20-30€ diarios podéis disfrutar de una solución intermedia entre el albergue y el hotel, en el que dispondréis de baño privado, salón, cocina...una opción a tener en cuenta si, por ejemplo, deseáis establecer ''base'' en una ciudad para desde allí realizar excursiones de un día.
En cuanto a la gastronomía, este es sin duda uno de los fuertes del viaje...buenísima, variada y barata..olvidaros de bocadillos o restaurantes de comida rápida...pastas, sopas, todo tipo de carnes, barbacoas, quesos, dulces...y una cocina mezcla de influencias italiana, griega y turca os hará realmente disfrutar. No olvidéis probar el burek, un hojaldre relleno de carne, queso o verduras, el čevapčiči, carne picada hecha a la parrilla y servida con pan, cebolla y salsa blanca, dulces como el baklava, a base de almendras, avellana y miel.
Por 4-5€ podéis comer en un restaurante del centro de ciudades como Sarajevo o Skopje, y por unos 6-7€ en Zagreb o Belgrado. Tomar un café, un refresco o una cerveza por menos de 1€ es algo que todavía se puede hacer en esta región..no os lo perdáis!
Idioma
Una de las preocupaciones habituales antes de realizar un viaje a los Balcanes es el tema del idioma, aspecto que en la práctica veremos resulta mucho más sencillo de lo que pensamos. Tras la desintegración de la antigua Yugoslavia, y el posterior abandono del serbocroata, de origen eslavo, como lengua oficial de la región, cada país ha ido adoptando su propio idioma, cambiando el tipo de alfabeto (cirílico, latino...) e introduciendo reglas gramaticales propias, aunque en muchos casos, siguen resultando idiomas muy parecidos.
Un ejemplo es la expresión ''buenas tardes'', que en esloveno es ''dober dan'', en croata ''dobar dan'' y en serbio ''Добар дан'', es decir, igual que en croata pero con alfabeto cirílico.
Sin embargo, para viajar por los Balcanes el inglés resulta más que suficiente, pues la mayoría de gente joven lo habla, y en hoteles, albergues, restaurantes o estaciones de las grandes ciudades, siempre suele haber alguien que lo hable. Incluso en las zonas más rurales, el buen hacer de la gente hará que las barreras lingüísticas no existan, pues si en algo se caracteriza la población de esta región, ya sea en Eslovenia, Bosnia, Serbia...es por su hospitalidad.
Algo que sin embargo puede facilitar bastante nuestro viaje es aprender el alfabeto cirílico, principalmente para las direcciones, buscar destinos en las estaciones...a priori puede resultar complicado, pero os aseguro que con empeño en un par de días podéis haceros con él..además descubriréis que muchas palabras son similares al español...por ejemplo ''teléfono'' en serbio es ''Телефон'', lo cual transcrito al alfabeto latino no deja de ser ''telefon''.
Otras cuestiones de interés
¿Cuándo viajar?: en mi opinión, la mejor época para viajar a los Balcanes es el verano. Menos lluvioso que la primavera y el otoño, el calor no llega a resultar agobiante, por lo que será habitual encontrar días soleados con temperaturas en torno a los 25º. Viajar en invierno puede resultar un arma de doble filo...es cierto que en esta época del año podemos disfrutar de paisajes nevados, del encanto de las ciudades en navidad...pero las temperaturas pueden descender varios (o bastantes) grados bajo cero, y el hielo puede dificultar bastante la conducción o el tránsito entre ciudades. Mi consejo es que para un viaje corto (fin de semana..) os planteéis ir en invierno, para una ruta larga, sin duda elijáis el verano.
Nacionalismos: la población de los países de la ex Yugoslavia destaca por su amabilidad y hospitalidad hacia el extranjero, pero no debemos olvidar que hace menos de 20 años sufrió la peor guerra existente en Europa desde la 2º Guerra Mundial, por tanto muchas heridas relacionadas con la política, los nacionalismos...siguen abiertas. Es por ello que, en muchas ocasiones, resulta conveniente no hablar de determinados temas, o en caso de hacerlo, tratarlos con mucho tacto. También os recomiendo no hacer gala de determinados souvenirs, ya sean banderas, determinadas insignias o incluso camisetas de fútbol, pues lo que en una capital puede ser bien visto, en otra puede ser considerado una provocación.
Seguridad: en general, los Balcanes es una región muy segura, por lo que únicamente será necesario tener las mismas medidas de seguridad que mantendríais en cualquier ciudad de la Europa occidental...ser precavidos en grandes aglomeraciones, estaciones de tren, autobús..o evitar los suburbios de las grandes ciudades a según qué horas...pero en general, el riesgo a sufrir un robo es menor que en ciudades como Londres, París o Madrid.
Salud: el nivel de hospitales y centros sanitarios en la región es aceptable, al menos en lo que se refiere a núcleos urbanos. No obstante, os recomiendo adquirir un seguro médico particular, pues a excepción de Eslovenia, Croacia y Grecia, el resto de países de la región no pertenece a la UE, por lo que no podremos utilizar nuestra tarjeta sanitaria europea. En cuanto a vacunas, ninguna es obligatoria, aunque para aquellos que visitéis zonas rurales, os recomiendo visitar la web del Ministerio de Asuntos Exteriores (maec) donde aclararán cualquier duda que tengáis al respecto.
Viajar a los Balcanes es sin duda una experiencia muy enriquecedora en todos los sentidos...lugares con encanto, paisajes, gastronomía...y sobre todo la amabilidad de una gente que os hará sentir como en casa...un viaje que independientemente de la época del año, la duración o el itinerario que escojáis, a buen seguro no os defraudará..a qué esperáis para descubrir esta región? los Balcanes os están esperando; )